Aquellos que me conocen saben que yo no puedo estudiar en casa, me distraigo con cualquier pequeña tontería, y necesito acudir a una biblioteca si quiero aprovechar bien mi tiempo.
Me he recorrido casi todas las de Madrid ya que, por alguna razón que no entiendo, tienen en mí el mismo efecto que las grandes catedrales: me relajan y me transportan fuera de este mundo.
Las bibliotecas antiguas, con ese olor a cuero y pergamino, librerías de madera y techos artesonados... son una de mis mayores debilidades.
La biblioteca de las Escuelas Pías tiene ese encanto, aunque carece de ese estupendo fondo bibliográfico; y es que esta antigua iglesia del s.XVIII me motiva como buena historiadora del arte, cuando entro en ella nada puede alejarme de lo que me ha llevado allí.
Las bibliotecas antiguas, con ese olor a cuero y pergamino, librerías de madera y techos artesonados... son una de mis mayores debilidades.
La biblioteca de las Escuelas Pías tiene ese encanto, aunque carece de ese estupendo fondo bibliográfico; y es que esta antigua iglesia del s.XVIII me motiva como buena historiadora del arte, cuando entro en ella nada puede alejarme de lo que me ha llevado allí.
Incendiado y saqueado en la guerra civil, este edificio permaneció abandonado, semi derruido, hasta que fue adquirido por la UNED y reconstruido por el arquitecto Linazasoro.
No es solo una iglesia reconvertida a la que se le ha dado un lavado de cara, sino un gran ejemplo de conciliación arquitectónica. Las soluciones modernas a los espacios reconstruidos y su integración con el marco original me parecen una genialidad.
Por desgracia es prácticamente inutilizable en invierno debido al frío inhumano que provoca la piedra de los muros y un mal sistema de calefacción (en la parte superior en vez de la inferior).
En cualquier caso yo la adoro y es otoño, así que es tiempo de sumergirme en el maravilloso mundo del arte en sus magníficos bancos de madera ;P
Dirección: C/Mesón de Paredes esquina con C/ Sombrerete. Barrio de Lavapiés.
Horario: 09.15 - 21.45 de Lunes a Viernes.
Cualquiera puede visitarla a última hora pero su acceso para el estudio está restringido a estudiantes universitarios.
¡Qué bonita!
ResponderEliminarRecuerdo que en más de una ocasión me has hablado de esta biblioteca. Incluso creo que alguna vez hemos pasado por al lado y nos hemos detenido a verla, eso sí, desde fuera.
Me encantaría conocer su interior, e incluso estudiar dentro de sus frías paredes. ¿Acabo de decir que me gustaría estudiar? No me reconozco...
Besitos!
jajaja, sí Susi, lo has dicho... que te he oído!
ResponderEliminarHe pasado por delante de este edificio en alguna de las ocasiones que he ido a Madrid pero no conocía la histoira del mismo. ¡Gracias!
ResponderEliminarMaresa.